Para 4 personas
125 gr. de harina
100 gr. de mantequilla
300 gr. de nata
200 gr. azúcar
300 ml. de agua
3-4 huevos
2 plátanos
Un chorrito de zumo de limón
Una pizca de sal
Hojas de menta
Grosellas
Coloca
los plátanos en una bandeja de horno y ásalos con la piel a 170º C
durante 10 minutos. Una vez asados, pélalos y machácalos en un plato con
la ayuda de un tenedor. Monta la nata, mézclala con el puré de plátano y
reserva.
Para
hacer la masa, pon a calentar el agua (250 ml.) en una cazuela con la
mantequilla y una pizca de sal. Cuando se disuelva, agrega la harina y
remueve con una varilla manual. Retira del fuego e incorpora los huevos
de uno en uno, sin dejar de batir con una varilla manual.
Introduce la masa en una manga pastelera con un boquilla rizada y coloca
Pequeñas
porciones alargados sobre una placa de horno forrada con papel de
hornear. Cocínalos en el horno a 180-200º C, durante 15-20 minutos.
Retíralos del horno, déjalos templar, ábrelos con una puntilla y rellénalos con la crema de plátano.
Pon
el resto del agua (50 ml.) en una sartén, agrega el azúcar y un
chorrito de zumo de limón. Funde a fuego suave hasta conseguir un
caramelo oscuro y baña los relámpagos. Sirve en una fuente amplia y
decora con unas hojas de menta y unas grosellas.
En
cuanto a los huevos, puedes añadir 3 o 4 dependiendo del tamaño de
éstos. Es importante agregarlos de uno en uno para ver la consistencia
que va tomando la masa. Si queda muy ligera no chuflará en el horno.
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